ELECCIONES PRESIDENCIALES EN EE. UU.: ¿CUÁLES SERÍAN LOS ESCENARIOS GEOPOLÍTICOS Y COMERCIALES PARA MÉXICO SI GANARA TRUMP?
Ciudad de México, a 10 de abril de 2024. — En el marco de las elecciones presidenciales en Estados Unidos este 5 de noviembre, donde Joe Biden del Partido Demócrata y Donald Trump del Partido Republicano se perfilan como los candidatos, destaca lo cerrado de las encuestas y la posibilidad de una victoria para Trump. Un hecho que tendría distintos efectos para México y el resto del mundo.
En entrevista para Norte Económico, el podcast de Grupo Financiero Banorte, la abogada y analista política Verónica Ortiz planteó los escenarios geopolíticos y comerciales si Donald Trump ganara la presidencia de Estados Unidos: “en la escena global, creo que sería una disrupción otra vez enorme, porque lo que trató de enderezar la administración de Biden en el sentido de la presencia de Estados Unidos, el peso con sus aliados, sobre todo en Europa; el tipo de política exterior, la participación de los Estados Unidos en temas como cambio climático y demás, pues todo eso estaría en absoluto riesgo”.
De acuerdo con Verónica Ortiz, la posible decisión de Trump de dejar de apoyar con recursos a Ucrania tendría repercusiones no sólo en aquel país, que se vería obligado a sucumbir, sino también en el peso que ha tenido Estados Unidos dentro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
En el ámbito comercial, a las tensiones existentes entre Estados Unidos y China se le podría sumar que el país norteamericano se retraiga de todos los escenarios internacionales que demandan su participación, además de una política de amenazas y de aranceles, explicó Verónica Ortiz.
“Creo que tendría un efecto de aislacionismo, otra vez, para la principal potencia del mundo. Yo creo que sería muy difícil de cuantificar en este momento en efectos comerciales en general, pero seguramente sería una disrupción” agregó.
Aunque Verónica Ortiz previó que esta guerra comercial continuaría con cualquiera de los dos candidatos, la diferencia de personalidades entre Trump y Biden es un factor decisivo para los chinos porque, aseguró Ortiz, a Biden lo consideran un político tradicional, mientras que a Trump impredecible.
Los posibles efectos para México
Respecto a la posible victoria de Donald Trump y los efectos en nuestro país, Verónica Ortiz expresó que el escenario de un regreso de Trump implicaría problemas para México en los temas de seguridad, migración y comerciales.
Específicamente en temas comerciales, explicó que existen dos paneles abiertos, el de energía y el de maíz, además de la posible revisión del T-MEC en 2026.
“El escenario que podría llevarnos esta revisión del T-MEC es a dos situaciones indeseables: una, que quisieran renegociar el T-MEC, como lo hizo efectivamente Donald Trump, o la otra: es que dijese que se va a salir. Otra vez, amenazar con que estamos violando el T-MEC”, concluyó.
La entrevista completa está disponible desde este miércoles en Spotify, Apple Podcast y GF Banorte.
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[00:16] - Alejandro Padilla
Hola, escuchas de Norte Económico. Los saluda Alejandro Padilla, economista en jefe y director general adjunto de Análisis de Banorte. Y en compañía de Lucero Álvarez, les damos la bienvenida al podcast de Banorte para alcanzar el horizonte de la economía. Estimada Lucero, estoy bastante entusiasmado por el tema que vamos a abordar hoy. ¿Cómo estás?
[00:42] - Lucero Álvarez
Alejandro, ¿cómo estás? Hola a todos. Feliz y también entusiasmada de acompañarlos un miércoles más, marcando el norte. Pues como comentas, Estados Unidos se prepara para sus elecciones presidenciales, un tema importante este año que hemos venido platicando en algunos episodios, ¿qué implica para el mundo y para México estos comicios? Justamente hoy platicamos con la doctora Verónica Ortiz, abogada y analista política, Alex.
[01:15] - Alejandro Padilla
Muchas gracias, Verónica, por acompañarnos nuevamente en la mesa de análisis de Norte Económico. Bienvenida.
[01:22] - Verónica Ortiz
Gracias, Lucero. Alex, para mí es un gusto siempre poder platicar con ustedes.
[01:28] - Alejandro Padilla
El gusto es nuestro. Y ya entrando un poco en materia, yo creo que no hay conversación de cualquier persona en México, sino está asociado a temas de elecciones en el mundo en este 2024. Y creo que una de las que más nos interesa, además de la del 2 de junio, es claramente la de Estados Unidos el 5 de noviembre. Y en ese sentido, nos gustaría saber cómo se están perfilando los candidatos de cara a las elecciones en Norteamérica, estimada Verónica.
[02:00] - Verónica Ortiz
Así es, Alex. Fíjate que sí tenemos este 2024, un verdadero maratón electoral. Prácticamente la mitad de la población del mundo va a acudir a las urnas o ya empezó a hacerlo. Obviamente, en elecciones que serán unas más democráticas que otras, pero estoy pensando en lugares, desde Rusia, India, la Unión Europea, México, evidentemente, y como tú bien decías, Estados Unidos en noviembre siempre próximo, que yo creo que sobra decirlo, esa es la elección que le importa a todo el mundo. Evidentemente, tiene implicaciones no solo para este país, acá yo estoy en Washington, entonces, no solo para este país, sino para el resto del mundo, y creo que a nadie escapa esa realidad. Yo empezaría diciéndote que ya estamos totalmente inmersos en el proceso electoral, no solo el de México, sino el de Estados Unidos. Y lo que es más, ya prácticamente está la boleta, como diríamos. No ha habido demasiadas sorpresas y todo parece indicar, salvo que ocurriese algo así excepcional, que va a ser una reedición o va a ser un déjà vu, que se repita la elección de 2016 entre Joe Biden por el Partido Demócrata y Donald Trump por el Partido Republicano. Y esto, la verdad, es que tiene, como te diré yo, en un estado un poco de ansiedad a la población y al electorado en Estados Unidos, obviamente el resto del mundo, Pero simplemente porque estamos hablando de dos candidatos, y un presidente, Joe Biden, que busca re elegirse, que por su edad, por los antecedentes, y que aunque se ve mucho más fuerte físicamente, es, digamos, tres años más joven que Joe Biden.
Entonces, estamos hablando de un electorado que lo que está viendo, pues es una revisión de una elección en donde van a ir dos señores ya mayores y parecería que en el ambiente y en el escenario político norteamericano, pues no hubiera ningún relevo generacional a la vista o por lo menos, digamos, lo suficientemente creíble, fuerte. El intento que hizo Nikki Haley, que fue la última contendiente dentro del Partido Republicano, en tratar de ganar la nominación, la verdad es que le duró muy poco. Aunque es una buena candidata, le duró poco el gusto, porque finalmente Donald Trump arrasó en las primarias. Todavía no termina esta serie de elecciones primarias que se hacen aquí, tanto en el Partido Republicano como el Demócrata. Pero lo que es un hecho es que ya tiene tienen ambos los suficientes votos electorales que se necesitan. Es decir, aquí es como un conteo para una elección indirecta, cosa que no deja de ser paradójica en una de las democracias más consolidadas del mundo. En realidad, no es como nosotros entendemos de un ciudadano un voto. Aquí, evidentemente, votan los ciudadanos, pero votan por otros electores que son los que determinan quién gana. Entonces, ya tenemos esos dos.
[05:26] - Verónica Ortiz
Y la verdad de las cosas es que, rumbo a la elección, las encuestas están muy parejas. Ya algunas están dando, sea a Biden o sea a Trump como ganador, pero te diré que, por el margen de error, es decir, tres puntos, cuatro puntos, estaba viendo esta semana en que hay un punto de diferencia a favor de Joe Biden en contra de Donald Trump. Entonces, ya están establecidos, digamos, estos dos candidatos. Todo parece indicar que, evidentemente, Joe Biden va a repetir en mancuerna: Aquí se elige la fórmula de presidente-vicepresidente, y repetiría con Kamala Harris. Y por el lado de Trump, está todavía la incógnita, y hay varios suspirantes, te diría yo, dentro de los republicanos que ya no siguieron en la contienda, que estarían a lo mejor tratando, pienso, por ejemplo, en Ron DeSantis, el gobernador de Florida, Greg Abbott, el el gobernador de Texas, aquel también empresario indio Vivek Ramaswami, que también trató de hacer ahí sus pininos, bueno, ese también se está acercando mucho a Trump. Y no hay claridad todavía sobre quién elegiría como su compañero de fórmula o compañera. Incluso se piensa que podría ser Nikki Haley, aunque se distanció bastante en la contienda interna.
Pero así están hasta este momento las, digamos, cómo va la carrera. Y cerraría yo este comentario diciendo que lo que parece increíble, la verdad, es que en esta democracia tan consolidada vayamos a tener la posibilidad de que se elija nuevamente a un expresidente, Donald Trump, que está acusado penalmente, civilmente, mercantilmente y tiene 90, digamos, delitos agrupados en alrededor de cuatro o cinco juicios y causas judiciales y que ha sido dos veces sujeto de procesos de desafuero, lo que aquí se llama el impeachment, que no prosperaron finalmente, pero que hubo evidencias de que se sostenía el tratar de desaforarlo. Y tienes a un agente que, de hecho, ya está siendo procesada y condenada en ciertas instancias a Por ejemplo, la más sonada es la de la prohibición de dirigir sus empresas durante tres años en el estado de Nueva York, el que se tiene que retirar de esos cargos directivos y un sinnúmero de causas judiciales, que todo el mundo piensa que eso lo podrían descarrilar. La verdad es que hasta el momento no lo han hecho. No hay una previsión en la legislación norteamericana que le impida hacer campaña, incluso, digamos, sujeto a juicio, incluso pensando que tuviera que pisar la cárcel.
Entonces, ahí hay ese vacío legal que le da la oportunidad de seguir, por lo menos en la contienda, hasta este momento. No sabemos todavía, evidentemente, qué va a pasar, pero todo parece indicar que vamos a llegar a ese momento. Y cuando tú ves las encuestas, pues sí parece la verdad increíble que un personaje de digamos, como Donald Trump pudiera ser reelecto por el pueblo norteamericano. Pero de ese tamaño es la fractura que hay. Cuando hablamos de polarización en México, todo te diría yo que acá es verdaderamente fractura, como decía yo. Es decir, la gente que quiere votar por Trump parece que no hay argumento posible que las pueda disuadir. Y al mismo tiempo, quienes están convencidos de que Joe Biden ha hecho un buen trabajo, pues también nadie los va a de lo contrario. Entonces, así estamos, Alex. Más o menos, ese es el terreno en este momento.
[09:36] - Lucero Álvarez
Siguiendo la ruta del proceso electoral de Estados Unidos, Verónica, lo comentas. Donald Trump justo le ha ido bien en las encuestas, tanto que vemos que los inversionistas ya platican entre ellos de cómo verán el escenario si gana las elecciones, qué pasaría con los mercados, con el tipo de cambio, todo eso. También leía un artículo que decía en su titular: No es que a los americanos les guste Trump, sino que no les gusta Biden para un segundo mandato. Te pregunto, ¿qué opinas de esto? ¿Qué implicaría una victoria de Trump para el resto del mundo, no solo para Estados Unidos?
[10:14] - Verónica Ortiz
Claro, Lucero, y tienes toda la razón, porque hay este tema de que no les gusta Trump a los republicanos o a un buen número de republicanos, pero efectivamente, tampoco les gusta Biden. Y aquí la verdad es que aunque suena algún tercero en discordia y normalmente a veces surgen, aquí se está hablando del sobrino de John Kennedy, que sin embargo, la verdad es que no llegan nunca muy lejos esas candidaturas independientes. Entonces, estamos hablando realmente de dos opciones. Y fíjate qué curioso, porque en el 2016 uno de los factores que hizo que ganara Trump fue el hecho de que había muchos votantes que no les gustaba Trump, pero definitivamente no concebían la posibilidad de votar por Hillary Clinton. Entonces, ahora estamos viendo, digamos, trasladado a 2024, un escenario también en el que dicen: Pues sí, la verdad es que no me gusta Trump, pero no puedo votar por Biden o porque sienten que Biden o la administración que ha llevado Biden se ha cargado más, digamos, hacia la izquierda del Partido Demócrata y entonces ya están como muy confrontados con esos republicanos más moderados. Y entonces podría darse, exacto, que, así como tú dices, un escenario igual en el que digan: Hijo, no me gusta Trump, pero no puedo votar porque se relija Biden.
Hay otro factor importante, y antes de comentar lo de los efectos en el mundo, también me parece la figura de la vicepresidenta Kamala Harris, que era la sucesora natural. Cuando se eligió a Biden en 2020, ya justamente una persona de su edad, con la trayectoria ya de décadas en el sobre todo en el Senado, aquí norteamericano, siempre se le veía como la heredera o sucesora natural que tendría estos cuatro años como para prepararse y ser una muy buena candidata demócrata a la presidencia, justamente pensando en que el presidente Biden, simplemente por temas de la edad, como digo, pudiera ser un presidente de un solo término. Y lo que ha sucedido, la verdad es que Kamala Harris más bien se ha desdibujado. Ella está efectivamente como más a la izquierda, más en el lado progresista, más radical del Partido Demócrata, y eso le ha restado apoyo dentro del propio partido. Y como potencial atractivo que pudiera tener hacia los republicanos que no les gusta Trump, la verdad es que definitivamente no se ve por ahí que pudiera tener algún efecto benéfico, digamos, para su causa o para los votos. Pero todavía se hace todavía más importante en este momento, porque si hace cuatro años se pensaba que ya Biden estaba grande y que en algún momento pudiera pasar alguna cosa que hiciera necesario que quien fuera vicepresidente asumir el poder, pues ahora se hace todavía más importante esa figura.
Entonces, por eso hablaba yo de que todavía incluso Trump no ha seleccionado a quién va a ser su compañero o compañera de fórmula, pero es una figura que dada justamente también la edad de Trump y los antecedentes, también sería mucho, muy importante. Y cierro en esta parte con el tema de que queda una incógnita también. Cuando hablaba yo de Nikki Haley, la exgobernadora de Carolina del Norte, ella se bajó de la contienda interna del Partido Republicano, pero no apoyó explícitamente a la figura de Donald Trump. Normalmente, cuando se bajan ya en este tipo de cuestiones, es para apoyar y hacer más fuerte la candidatura de quien se esté quedando. Nikki Haley no lo hizo. Nikki Haley tiene como el 14% de intención de voto dentro de los republicanos, pero no ha dicho que respalda a Trump. Se esperaría que lo hiciera, pero queda ese segmento, justamente ahí los puedes identificar, ese segmento de votantes que dicen: Yo soy republicano, pero no hay manera de que vote por Trump, dado todo el historial y todo lo que hemos visto y comentado de este personaje. Y entonces, ahí queda la incógnita de si Nikki Haley lo que quiso es decir: Bueno, pues que voten por quien quieran, pero no hizo, o sea, no le dio su respaldo, su endorsement, como se dice en inglés no se lo dio explícitamente a Trump.
De la pregunta que haces del efecto, justamente, para el mundo, me parece que sería muy riesgoso, muy peligroso, y vámonos, si quieres, justo de lo grande. Para el mundo. Punto número uno, en la escena global, creo que sería una disrupción otra vez enorme, porque lo que trató de enderezar la administración Biden en el sentido de la presencia de Estados Unidos, el peso de Estados Unidos con sus aliados, sobre todo en Europa, el tipo de política exterior, la participación en temas o el peso también de los Estados Unidos en temas como cambio climático y demás, pues todo eso estaría en absoluto riesgo. Donald Trump ya dijo que dejaría de apoyar, o sea, ni un solo dólar más para Ucrania, con las repercusiones y con el riesgo que eso tiene en este momento en que Ucrania se ha defendido, pero los recursos y el apoyo están bajando y sin el apoyo exterior, Ucrania simplemente va a sucumbir. Y eso tiene unas implicaciones terribles, no solo para Ucrania, sino, creo yo, para la democracia en general, en el resto del mundo. ¿Qué pasaría con eso? ¿Qué pasaría, por ejemplo, con el apoyo que ha tenido, y dentro de la OTAN, Estados Unidos?, ¿y con el peso que ha tenido en la OTAN?
Donald Trump ya le dijo también al presidente ruso, que le daba permiso de invadir o de hacer lo que quisiera con los países que no apoyaran económicamente o no pagaran sus cuotas a la OTAN, sometiendo a lo que ya la conocemos bien, a este chantaje económico, que en México lo conocemos, de que, si no dan dinero, entonces no hay acuerdo que valga. Con las repercusiones, nuevamente, que puede implicar. Ya vimos a Suecia ingresando formalmente ya a la OTAN hace apenas unas semanas, muy recientemente, precisamente porque lo que buscan es protegerse frente a una eventual agresión por parte de Rusia, como ya la sintió y la vivió Ucrania. Entonces, sí creo que tendría un efecto de aislacionismo, otra vez, para la principal potencia del mundo. Yo creo que sería muy difícil de cuantificar en este momento en efectos comerciales en general, pero seguramente sería una disrupción. No sabemos cuál sería el nuevo acercamiento o visión que tendría respecto a la disputa comercial con China. Si volvería a hacer este tema nuevamente de amenazas, de aranceles y demás, pero muy probablemente pudiera ser esa la política de Trump. Y como te decía yo, esta parte de que nuevamente Estados Unidos se retraiga de todos los escenarios internacionales que demandan una participación enorme de los Estados Unidos. Entonces, creo que de entrada veríamos eso y peligraría eso en la escena mundial.
[18:29] - Alejandro Padilla
Y además, creo que esto implicaría que el tablero geopolítico estaría cambiando de una manera bastante importante, como bien has mencionado. Y si bien ya desde hace algunos años hemos visto, yo creo que esa polarización en el mundo con, yo creo que estos dos grandes gigantes, Estados Unidos y China, tratando de ganar una hegemonía más allá de lo económico, de lo político, de lo social, creo que eso justo implicaría un nuevo orden y un cambio en la percepción de lo que conocemos hasta el movimiento por globalización y también lo vemos en el comercio exterior. Y yo creo que en ese sentido me gustaría que nos pudieras comentar qué debemos de esperar justo en esas tensiones que existen entre estos dos gigantes, Estados Unidos y China.
[19:24] - Verónica Ortiz
Sin duda, Alex. Como decía yo, no sabemos exactamente, digamos, cómo se vería materializada justamente esta rivalidad o qué peldaño subiría o escalaría o presionaría más Donald Trump, pero ya tenemos como el antecedente. Yo creo que en China tienen como esta visión dual, e incluso estaba justamente yo leyendo de reportes de funcionarios justamente chinos o el Partido Comunista, que obviamente están haciendo escenarios de qué pasa si vuelve Trump. Por un lado, les preocupa porque comparado con la administración Biden, sienten a Biden, digamos, mucho más predecible, quizá, y lo digo entre comillas, mucho más confiable, en el sentido de que Biden es un político tradicional, saben qué tipo de cuestiones le interesan o dónde presiona y demás, mientras que justamente Trump, cosa que nosotros también lo sabemos en México, es totalmente impredecible, no se sabe si en un momento de arranque qué decisión pueda tomar o qué pueda hacer. Entonces, eso tampoco les gusta a los chinos que tienen esta idea de toda una economía y, digamos, todo un desarrollo planificado y superplanificado de antemano. Entonces, esos escenarios impredecibles tampoco les gustan. No saben si se redoblaría el tema de las tarifas que ya de por sí había impuesto en su administración Donald Trump.
Es decir, la guerra comercial va a seguir con cualquiera de los dos, pero por el tipo de personalidades y por el tipo ya de asuntos, que efectivamente se han llevado o las políticas que han seguido. A eso me refiero con que, por un lado, sienten que a lo mejor se pueden acomodar más de un lado o del otro, pero hay estos temas que les preocupan, como esto de la impredecibilidad de Donald Trump, por ejemplo, las tarifas, la agresividad otra vez de Donald Trump, que ya está hablando nuevamente del COVID chino, como si hubiera sido algo exprofeso, creado por China para alterar incluso el tema económico mundial. Y ese tipo de acusaciones, las repercusiones que puedan tener. Por el lado de Biden, por ejemplo, lo que no les gusta de Biden a los chinos y que a lo mejor con Trump no sería tanto problema, es que Biden presiona e insiste mucho en la independencia de Taiwán y en la no agresión, y en esta idea de que no se puede China, digamos, meter en un tema de alterar la situación como está ahora o el statu quo que se ha visto en Taiwán. Y sobre todo esos temores que se dieron a raíz de la invasión de Rusia a Ucrania y que China estaría pensando en un tema similar que sucediera en Taiwán.
Entonces, ese lado les preocupa más a los demócratas que a Trump, que todo se reduce justamente a un tema de comercial y de dinero. Entonces, creo que todavía no sabemos en qué escala estaría o qué estaría pensando Donald Trump para la relación con China. Lo que sí sabemos es que Xi Jinping al igual que Vladimir Putin, han maniobrado dentro de sus propios países y legislaciones, y los dos se van a quedar un rato más. Entonces, claramente ahí no va a haber cambios y entonces van a tener que jugar con esos jugadores, para bien o para mal, ya se conocen. Trump también ya conoce a Xi y al principio parecía que tenían una muy buena relación, que luego se enfrió y que luego hizo en esta guerra comercial que bajara muchísimo la importancia y el peso de las importaciones chinas en la economía americana. Eso nos dio a nosotros la posibilidad de convertirnos en el socio número uno de Estados Unidos. Y no sabemos, entonces ¿contra quién dirigiría más las baterías, si en ese sentido contra China o incluso contra México, como ya lo ha anunciado. Entonces, está creo que un poquito en el aire, pero si nos atenemos a lo que sucedió, sí creo que se incrementaría esta guerra comercial en un momento en que la economía china está pasando por una situación un poco delicada, porque también ha perdido fuerza y porque no es un d2igamos, ha perdido ese impulso que tenía, que parecía que iba a rebasar en el muy corto plazo, dentro de esta década, a la economía de Estados Unidos. Ahí ha habido más problemas y una ralentización de la economía china, que, si llegan, digamos, tratamientos de shock por parte de un Trump recargado, pues quizá no los tomaría en el mejor momento, económicamente hablando.
[24:41] - Lucero Álvarez
Y podríamos decir que muchos están intentando, digamos, planear un futuro ante un posible regreso de Trump al poder. Les cuento que profesores de la Universidad de Houston y la Universidad Costera de Carolina realizaron una encuesta a historiadores y académicos sobre quiénes han sido los mejores presidentes en Estados Unidos, y fueron 45 presidentes evaluados. Abraham Lincoln encabeza esta edición. Biden se posiciona en el lugar número 14. Donald Trump ocupa la última posición, es el peor evaluado. Y vemos que hay mucho contraste en los distintos sectores que podrían brindarle el voto. Aquí se nota esta polarización, pero de la que hablabas. ¿Cómo toma México la posibilidad de una victoria de Trump? ¿Qué nos implicaría y en qué temas, principalmente? ¿Qué opinas?
[25:32] - Verónica Ortiz
Sí, así es, Lucero. Fíjate que muy interesante ese estudio al que haces referencia. Y lo que es increíble, justo que te decía yo hace unos momentos, es que estamos viendo a un electorado norteamericano que no obstante eso, y no obstante que está evaluado como el peor presidente de los 45 que van en Estados Unidos y resulta que estarían dispuestos a elegirlo nuevamente. Entonces, eso te habla, creo yo, de la fractura que mencionaba antes y también de una crisis más profunda en Estados Unidos, que estoy viendo y hago un comentario breve de esto. Creo que los Estados Unidos están en un momento de crisis de identidad que hace que estas posturas extremas o que estos argumentos que nosotros estamos viendo, como simplemente que sea el peor evaluado, lo que decíamos de todos esos problemas legales. Y la cantidad de veces que aquí en Estados Unidos, desde que llegó Trump al poder, empezamos a escuchar, es que nunca se había dado esto. O sea, nunca había habido un presidente enjuiciado dos veces. Nunca había un presidente que hubiera sido acusado penalmente y luego ya condenado a pagar compensaciones, condenado a deshacerse de sus negocios, entonces, se han roto muchos paradigmas de la democracia norteamericana y aún así un personaje de estos sigue adelante y probablemente sea reelecto. Entonces, creo que hay que ver una crisis de identidad, a mi modo de percibirla aquí en Estados Unidos, que tiene mucho que ver justamente con una ansiedad de la que yo hablaba al principio, que está relacionada, creo, también con esta disminución de la población anglosajona en Estados Unidos, que ha pasado de ser el 88%, que era en la década de los 60, 70, allá estamos en un 60 y tantos por ciento en esta década de los 2020. Esta caída drástica de la población anglosajona, que se está convirtiendo justamente en minoritaria dentro de su propio país, creo que tiene repercusiones más allá simplemente de las demográficas que se pueden constatar y que han crecido más otros grupos como los latinos, incluso más que los afroamericanos, los asiáticos. Y eso tiene unas repercusiones políticas, sociales, que las ha sabido aprovechar Donald Trump desde su primera campaña. Y por eso vemos, creo yo, esta polarización y esta fractura tan marcada, porque hay algo como muy íntimo en el psique, en el imaginario colectivo de la población, sobre todo anglosajona, que se siente como que se le está yendo el país que ellos imaginaban o que tenían, que existían en otras décadas.
Y entonces, sí es esta sensación como de ansiedad, como de frustración, como de ganas de reivindicar lo que les quede de tiempo, digamos, siendo todavía mayoritarios. Y entonces, hay esa crisis identitaria, como les digo, que me parece que está jugando un papel muy importante y que hace que otros temas ya pasen a un segundo plano, mientras sea algo de decir: Pero es que nosotros, este es nuestro país y lo tenemos que defender. Vean todo el lenguaje de las invasiones, de la contaminación de las diferentes nacionalidades o razas que no sean, obviamente, anglosajonas. Entonces, todo este discurso racista, xenófobo, tiene su origen en esa crisis de identidad que está dándole forma a estas elecciones y a este periodo difícil en los Estados Unidos y difícil para el mundo. En México, claramente, no somos ajenos a esto. Y la crisis con México ha tomado un giro, me parece sumamente negativo de cuando fue la elección primera de 2016 de Trump y a esta contienda, por qué México está presente por las malas razones y sobre todo por dos temas, el tema de migración y el tema de Fentanilo. Y quedan exactamente en el corazón del argumento de mi percepción que les comentaba ahora. ¿Por qué? Porque la migración, evidentemente, lo sienten ya no como un beneficio, sino como una amenaza. Nada más hay que ver la retórica del gobernador Abbott, que, para justificar la política, digamos, antiinmigrante que tiene en Texas, habla de una invasión, porque entonces él invoca que los estados tienen derecho a defenderse de una invasión y entonces se brinca el tema migratorio, porque el tema migratorio sabe que es de competencia federal y no estatal, entonces él habla de una invasión. Y el tema del Fentanilo, porque justamente ha atacado desde la crisis de los opioides y después todo este tema del Fentanilo, ha atacado a la población también blanca, caucásica, de todas las edades y de todos los estratos sociales. Entonces, ya no es un tema de drogas, a lo mejor vinculado con minorías, como podría haber sido la cocaína, el crack, todo esto, sino que ya estamos hablando de una epidemia que mata a 100 000 norteamericanos más o menos al año y que les está afectando justo en ese segmento de población blanca de todas las edades y sobre todo en edades productivas y de gente que... Y muy joven también. Entonces, esas dos cosas están siendo vinculadas a México directamente. Y entonces, nosotros estamos presentes en la campaña electoral y en la contienda por las malas razones, me parece que desafortunadamente, quizá todavía ni siquiera hemos visto cómo se va a poner la retórica todavía más agresiva. Recuerden que Trump dijo que no iba a ser un dictador, excepto por el primer día, para cerrar totalmente la frontera con México y no dejar pasar migrantes. Obviamente, no solo son migrantes mexicanos, aunque ya hay nuevamente migrantes mexicanos. Pero el mensaje es muy claro, porque además es un mensaje electorero, porque Biden ya propuso una legislación con apoyo bipartidista para justamente tener más facultades respecto del tema de la frontera. Y Trump ordenó literalmente a los legisladores republicanos de que nadie respaldara ni votara a favor de esa propuesta, con lo cual queda muy claro que no le interesa resolver el tema, lo que le interesa es sacarle raja política y que la encuentra. Es decir, increíblemente, lo mismo que le funcionó en 2016, cuando habló de los que llegaban de México, que eran violadores y asesinos y demás, le sigue funcionando en este momento. Y ahí es donde México, creo que podría tener una intervención más asertiva, como se dio cuando justamente Trump amenazó con los aranceles en el 2019 y que redujimos drásticamente haciendo el trabajo sucio y convirtiéndonos en tercer país seguro de facto y demás, pero se dio una disminución muy sensible.
En aquel entonces, cuando Trump dio la amenaza y el manotazo de la imposición de aranceles, estaban siendo detenidos en la frontera con México alrededor de 166 000 migrantes. Por ejemplo, ahora en diciembre, se detuvo o se detuvieron a más de 300 000 migrantes. Entonces estamos para que... Imagínense cómo creció exponencialmente. Se redujo mucho en el 2019 y obviamente después con la pandemia, pero ya una vez pasada la pandemia y demás, los números no han hecho sino subir. Y estamos viendo las escenas en la frontera, que son las que usa y explota Greg Abbott, de los migrantes que quieren forzar la entrada y quieren entrar a Estados Unidos para que sean procesados. Claramente hay un sistema migratorio que es totalmente inoperante, porque sí necesitan la mano de obra acá, pero al mismo tiempo tienen un sistema que no es capaz de procesar todas esas personas que quieren migrar, que ahora ya son familias, ya no nada más son hombres jóvenes o en edad de trabajar, sino que ya son familias completas. Y al mismo tiempo no se ha podido ni siquiera, pues, aminorar las condiciones de expulsión de países como Cuba, Venezuela, Nicaragua, Haití, Honduras y demás.
Entonces, tenemos ese pendiente nosotros, o sea, que nos atañe también directamente el tema de la migración. Tenemos lo del tema del Fentanilo y tenemos, claro, la parte comercial. Y la parte comercial es sumamente importante y delicada a nosotros en México, porque tenemos dos paneles abiertos, el de energía y el de maíz, y además tenemos una ya de reclamo, que podría convertirse en otro panel sobre el acero chino, justo que está llegando a Estados Unidos en cantidades excedentes y que tiene su origen, en todo caso, a través de México, de China hacia México. Todo esto en el marco de la revisión del T-MEC en 2026, que se recordarán que se incluyó la cláusula Sunset, que era para poder revisar el tratado. Y creo que es una alerta que no debemos de pasar por alto, porque el escenario que podría llevarnos esta revisión del T-MEC es a dos situaciones indeseables: una, que quisieran renegociar el T-MEC, como lo hizo efectivamente Donald Trump, es decir, él sabe el caminito. O la otra es que dijese que se va a salir, otra vez, amenazar con que estamos violando el T-MEC o Tenemos estos paneles abiertos o lo que sea, y que pudiera amenazar con salirse del T-MEC.
Ya sabemos que son amenazas creíbles en ese sentido, o sea, de que sí pueden causar una disrupción. Y sobre todo nos pueden afectar directamente con las expectativas que tenemos nosotros del famoso nearshoring o de la captación de mayor inversión, pues creo que nos darían directamente en la línea de flotación. Entonces, creo que el escenario de un regreso de Trump sí implica problemas para México, como decía yo, sobre todo en el tema de seguridad, en el tema migratorio y en el tema de comercial, además de nuestros propios problemas o retos en cuanto a la elección que vamos a tener en junio y en cuanto a, no sé, una posibles controversias postelectorales que se nos dificultara incluso procesar una transferencia pacífica del poder o que el escenario se complicara políticamente en México, la verdad es que es un caldo de cultivo muy peligroso para la relación. Y no hay que olvidar que la relación más importante que tenemos es con Estados Unidos y que a pesar de todos los detractores que se puedan tener con Estados Unidos, es la relación y el tratado es lo que nos ha mantenido justamente comercialmente avante. Y más que denunciar la relación con Estados Unidos, lo que deberíamos buscar, que se ha puesto de manifiesto, es llevar los beneficios que se dieron con el tratado, que se siguen dando, llevarlos a todo el país, porque ahí sí tenemos, evidentemente, todavía rezagos importantes y que esos beneficios, claramente, no han llegado a toda la geografía nacional.
Entonces, sí, la situación es complicada. En caso de que se reeligiera Biden, un poco como decíamos al principio, ya tenemos un poco más la idea de qué es la administración Biden qué le preocupa. Creo que tendríamos más presión por el tema de la erosión democrática, la erosión de las instituciones. Creo que la administración Biden se está dando cuenta de que el arreglo que teníamos y que favorecía, en todo caso, al presidente, el López Obrador con Trump, que mientras nosotros cumpliéramos la parte esta de migración, pues el presidente Trump, la verdad es que no le importaba los temas de democracia en México. A la administración Biden, me parece que tiene otro enfoque y aunque a la administración Biden lo que más le preocupa en este momento es el tema de migración, si lograra el presidente Biden reelegirse, pues también creo que ampliaría su espectro de temas en los que quizá estaría bajo presión el gobierno mexicano.
[39:34] - Alejandro Padilla
Oye, estimada Vero, pues muchas gracias por tan completo análisis del entorno electoral en Estados Unidos, que, además, honestamente, lo tocaste desde distintas dimensiones muy interesantes en lo económico, obviamente en lo político y tanto en lo social. Y bueno, pues ahora nos gustaría invitarte a la última sección del podcast que tú conoces muy bien, Gurú Económico, en donde hablamos sobre recomendaciones de libros y de vinos. Así que tomando en cuenta esto, ¿qué te gustaría recomendarnos en esta ocasión, Vero?
[40:10] - Verónica Ortiz
Sí, me gusta mucho esta parte para terminar con una recomendación. A ver, mira, yo tengo dos recomendaciones de libro, uno más actual y el otro que me parece que vuelve a ser de actualidad. El primero se llama “Un viaje por la historia económica de México. Mis primeros 80 años”, que es de Francis Suarez Dávila. Creo que claramente es un personaje conocido por todos los escuchas de este podcast, pero me parece muy interesante porque en México, a diferencia de en Estados Unidos, que todo el mundo escribe sobre su paso por la administración o sobre sus experiencias o sobre su vida, etcétera, en México tenemos poco esa idea de dejar plasmado el paso de funcionario. Yo ya no solo hablo de presidentes o expresidentes, sino simplemente alguien que haya tenido alguna posición dentro de la administración o algo, o incluso de empresarios o del sector privado. Entonces, creo que es muy agradecible el hecho de que Francisco Suárez Dávila haya puesto justamente por escrito su paso, porque no hay que olvidar que fue funcionario público, embajador, con una amplia trayectoria y sobre todo con sus impresiones y muchas veces su trabajo directo a lo largo de crisis y recuperaciones que marcaron buena parte de la mitad del siglo XX y hasta el momento.
Entonces, me parece una lectura, además, muy ligera, muy amena. Francis Suárez es muy ameno para platicar y a la hora de escribir también es así, porque está el libro también impregnado de sus propias anécdotas, de sus recuerdos, de sus experiencias. Entonces, creo que de primera mano nos va llevando por estos 80 años, como dice, en sus primeros 80 años, pero sobre todo por la historia económica de México, económica y política también. Entonces, me parece muy interesante. Es de Editorial Debate y lo recomiendo mucho. Y el segundo es un pequeño librito que se llama “Qué es el populismo” de un profesor de ciencias políticas de Princeton, que se llama Jan Bernert-Müller, y es un librito muy pequeño que escribió justamente después de ser electo Trump, la primera edición es de 2017. Por eso decía yo que no era tan actual, pero me parece que cobra actualidad, porque justo todo lo que estamos hablando, el posible regreso de Trump bajo la misma esencia y cómo todavía tenemos tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo, este no sé, este embrujo de los líderes populistas que se asumen como la encarnación de los pueblos y los únicos que saben lo que se necesita hacer, pero que básicamente lo que tienen es esta idea de usar las instituciones democráticas para después erosionarlas.
Creo que Trump, claramente, es un ejemplo, pero no solo él. Y creo que también, por lo que hace la elección en México y por lo que estamos viendo en el resto del continente, americano sobre todo, está bien recordar qué es el populismo, por qué estos líderes resultan tan atractivos y dónde están justamente las fallas estructurales que permiten que estos líderes lleguen. Entonces, esas serían mis dos recomendaciones del libro, Alex y Lucero. Y el vino, yo recomendaría, sobre todo para estas épocas que empieza a hacer más calor y se antoja, justamente, así en una terraza tomar una copa de vino. A mí, el rosado V, V de Verónica, pero no es por mí, V chica. El rosado V de Casa Madero me parece un vino muy agradable y sobre todo también por el costo. Me parece un gran vino que así muy frío la verdad es que combina con mariscos, con botanas, con platillos justo que se antojan en este clima allá, que empieza a ser mucho más agradable, caluroso. Entonces, esa sería mi recomendación.
[44:42] - Lucero Álvarez
Y se puede también acompañar con estas dos recomendaciones de libros que nos compartes, que se acoplan muy bien también a nuestro contexto económico, social y político. Y fíjate, este primer libro que nos mencionaste ·Un viaje por la historia económica de México·, el título es bastante interesante, porque justo después de la pandemia y el impacto de los recientes acontecimientos geopolíticos, siguen dejando huella, cambiando el rumbo y marcando la historia económica de México. Esto sigue. Y aquí le damos seguimiento platicando contigo.
[45:16] - Verónica Ortiz
Totalmente, Lucero. Efectivamente, creo que de eso no nos vamos a librar todavía. Y evidentemente todavía estamos viendo esos resabios y la cola y todo lo que cambió y alteró la época de la pandemia y cómo seguimos todavía, digamos, arrastrando tanto lecciones positivas, pero también algunas negativas y algunas como heridas económicas, sociales, que todavía nos estamos recuperando.
[45:46] - Alejandro Padilla
Pues muchas gracias, Vero. Recomendaciones obligadas. El libro de Jan Werner-Müller y del embajador Suarez Dávila creo que claramente lo van a apreciar mucho nuestros escuchas y sin lugar a duda con ese rosado V de Casa Madero. Y no sé si ahorita ya está el cherry blossom en Washington. Ya está, yo creo que combina muy bien, ¿no?
[46:09] - Verónica Ortiz
Justo, estos días, justamente, es el máximo esplendor de los cherries, de los cerezos, acá en Washington. Pero a diferencia de México, la verdad es que acá sigue haciendo todavía bastante frío. Entonces, el rosado creo que va a tener que un ratito aquí, pero en México, con el clima tan agradable, ya se antoja ese vinito rosado bien frío. Pero sí, ya les mandaré fotos del cherry blossom de acá.
[46:42] - Alejandro Padilla
Sí, no, seguro. Muchísimas gracias, Vero. Y Además, también te agradecemos el tiempo para poder tocar estos temas de gran interés para todos nosotros. Y, obviamente, siempre serás bienvenida en Norte Económico. Muchísimas gracias.
[47:01] - Lucero Álvarez
No, un gusto siempre, Álex, Lucero, y un saludo muy fuerte a todo su auditorio y encantada de platicar.
[47:09] - Alejandro Padilla
Muchísimas gracias. Te mandamos un fuerte abrazo.
Y bueno, con esto, amigas y amigos de Norte Económico, concluimos un episodio más del podcast de Banorte para alcanzar el horizonte de la economía. Nos escuchamos la próxima semana para una edición más y por lo pronto cuídense mucho. Aprovechen las y les mandamos un fuerte abrazo.