LAS 4 CLAVES PARA ENTENDER LA COYUNTURA ECONÓMICA DE EE.UU.
EPISODIO 7 - PODCAST NORTE ECONÓMICO
- 8.4 billones de dólares, equivalentes a 37.6% del PIB de Estado Unidos, son los estímulos fiscales que ese país realizó para evitar mayores efectos negativos de la pandemia en su economía.
- “El nivel de deuda en Estados Unidos sobre PIB se elevó al 133%, un nivel muy alto, similar al de la economía de Japón. Un nivel alarmante que no es sostenible a lo largo del tiempo” afirmó Alejandro Padilla.
- El Banco de la Reserva Federal podría hacer oficial el anuncio del tapering en su siguiente reunión de política monetaria los próximos 2 y 3 de noviembre.
Ciudad de México, 7 de octubre de 2021. — Alejandro Padilla, líder del área de Análisis Económico de Grupo Financiero Banorte, hizo un análisis de la situación económica de Estados Unidos y listó las cuatro principales claves para entender cuáles podrían ser sus repercusiones.
En primer lugar, destacó que ante la situación de la emergencia por la pandemia del COVID-19, el gobierno de Estados Unidos realizó durante 2020 cinco grandes programas de apoyo fiscal por cerca de 3.7 billones de dólares, lo que equivale al 18.1% de su PIB. Esta medida se extendió con los estímulos aplicados durante este 2021, que en su total suman 8.4 billones de dólares, o su equivalente a 37.6% del PIB. Destacando en los programas del Plan de Infraestructura y el Plan de Apoyo a las Familias.
Además, Padilla afirmó que esta es una respuesta fiscal sin precedentes que ha ayudado a Estados Unidos a sortear una de las peores crisis desde la Gran Depresión de 1929.
Como segunda clave, está el problema del techo de endeudamiento, donde se está experimentando una situación “altamente compleja”, según el analista financiero, ya que en estos momentos se vive una crisis política donde no hay un acuerdo entre los legisladores para empujar el límite de deuda.
“El nivel de deuda sobre PIB se elevó al 133%, siendo un nivel muy alto, similar al de la economía de Japón. Un nivel alarmante que no es sostenible a lo largo del tiempo. De no llegar a un acuerdo, podría derivar en ramificaciones negativas para el resto del sistema financiero global”.
La tercera clave es la discusión entre los legisladores, quienes analizan el presupuesto para el próximo año fiscal por 3.5 billones de dólares. Los beneficios son para las familias y un plan de infraestructura con enfoque social adicional por 550 mil millones de dólares.
Este plan es apoyado por Nancy Pelosi, líder en la Cámara Baja y líder de los Demócratas. El próximo 18 de octubre será un día clave, donde si no llegan a un acuerdo, el gobierno de Estados Unidos podría cerrar parcialmente o dejar de pagar sus pasivos, trayendo una aversión a un riesgo mayor.
El analista dijo que el Banco de la Reserva Federal está en un dilema de cara al anuncio del tapering. Esta es la cuarta clave y punto medular porque “los mercados ya lo están esperando, significan que se irá normalizando el gran estímulo cuantitativo de la parte más álgida de la crisis de la pandemia. El Fed utilizará su canal de comunicación para no generar disrupciones innecesarias en los mercados financieros”.
Finalmente, Alejandro Padilla dijo que el Fed está próximo a normalizar las condiciones monetarias. “Estados Unidos será el foco de atención a lo largo del cuarto trimestre, porque será un impacto muy importante en todos los mercados financieros y en las decisiones de empresas como Banorte van a tomar en el futuro”.
La entrevista completa está disponible desde este miércoles en Spotify, Apple Podcast y en el sitio GFNorte.
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Director Ejecutivo de Comunicación Corporativa
Cel.: (55) 4522-6753 / francisco.rodriguez.daniel@banorte.com
Alfonso Cadena
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Transcripción:
Alejandro Padilla: Hola, les mando un afectuoso saludo a todos ustedes, les doy la bienvenida a Norte Económico, el podcast de Grupo Financiero Banorte, yo soy Alejandro Padilla, conductor de este podcast, además de tener el honor de liderar los equipos de Análisis Económico y Estrategia Financiera de Mercados de Banorte.
Y bueno, me da muchísimo gusto que nos acompañen como cada semana y, en esta ocasión, estaremos analizando en el podcast un tema que se ha vuelto crucial para la economía de los mercados financieros, que es la situación que está pasando actualmente en Estados Unidos sobre las políticas económicas tanto en la parte fiscal como en la parte monetaria, así que acompáñame al análisis de estos importantes temas.
Cortinilla: Visión 306.
Un análisis a fondo de los factores que mueven a la economía.
Alejandro Padilla: Para llevar a cabo un episodio estructurado sobre la situación fiscal y monetaria en Estados Unidos, el análisis lo conduciré a través de cuatro temas principales: el primero, el complejo panorama sobre la situación fiscal, especialmente durante la era del COVID, el segundo es el problema del techo de endeudamiento que ha venido arrastrándose desde hace varios años en Estados Unidos, pero que ahorita está viviendo un momento bastante álgido. El tercero hace alusión a las negociaciones en torno del presupuesto por 3.5 billones de dólares, así como un plan de infraestructura adicional por cerca de 550 mil millones de dólares, y el cuarto, el dilema que está enfrentando actualmente el Banco de la Reserva Federal de cara al posible anuncio de la disminución de su programa de compra de activos, conocido como tapering, que probablemente se dé en su siguiente reunión de política monetaria los días 2 y 3 de noviembre.
Una vez dicho esto, iniciemos con el primer tema, este complejo panorama sobre la situación fiscal en Estados Unidos. Y bueno, para dar contexto a este tema tan importante de políticas económicas en Estados Unidos, debemos recordar el fuerte estímulo que se llevó a cabo desde marzo del 2020, cuando inició la pandemia del coronavirus. Por la parte fiscal, a lo largo del año pasado bajo la administración del expresidente Trump, se llevaron a cabo cinco grandes programas de apoyo fiscal por cerca de 3.7 billones de dólares, o 3.7 trillion dollars para ponerlo en términos anglosajones, que es el equivalente a 18.1 puntos porcentuales del PIB, entre ellos destacando el CARES Act y el Response & Relief Act.
Posteriormente, en 2021, estos estímulos se extendieron de manera importante, sumando ahora 8.4 billones de dólares, o su equivalente a 37.6 puntos porcentuales del PIB, estos últimos ahora bajo la administración del presidente Biden, y bueno, en donde destacan sobre todo el plan de infraestructura y el plan de apoyo a las familias. En términos generales, esta es una respuesta fiscal sin precedentes que ha ayudado a Estados Unidos a sortear, pues una de las peores crisis desde la Gran Depresión de 1929. Sin embargo, la otra cara de la moneda es el deterioro que estamos observando actualmente en las cuentas fiscales y sobre todo la necesidad de normalizar esta situación en los siguientes años, es algo bastante apremiante y por ello es que las discusiones se han tornado mucho más acaloradas.
Y bueno, obviamente esto ha resultado en un impasse político muy importante en tres temas cruciales: el primero, detener o suspender temporalmente el límite de endeudamiento, el segundo, aprobar el presupuesto por 3.5 billones con una serie de programas de gasto tanto en infraestructura como en temas sociales. Y el tercero, un plan adicional de infraestructura por 550 mil millones de dólares.
Esto nos lleva al segundo punto, que es justo el problema del techo de endeudamiento que ha venido enfrentando Estados Unidos desde hace varios años, este es un tema medular, es una discusión importantísima que está moviendo mucho a los mercados financieros y que también está determinando muchas de las decisiones de inversión que van más allá de Estados Unidos y obviamente para nuestro país también se vuelve algo relevante.
Bueno, pues en Estados Unidos se han llevado a cabo mecanismos para el control del nivel de deuda federal desde hace mucho tiempo, estamos hablando desde 1917. Sin embargo, desde la gran crisis financiera global de 2008 y 2009, la situación fiscal se ha tornado mucho más compleja, la necesidad de paliar aquella crisis a través de la combinación de importantes estímulos fiscales y monetarios, llevaron a Estados Unidos a un impasse legislativo sin precedentes en el 2011, en donde pudo evitarse, de último minuto, el cierre de actividades del gobierno, algo que actualmente se está discutiendo y es un riesgo latente, que el gobierno tenga que cerrar parcialmente y que en algún momento llegué a una situación de impago.
Bueno, remontándonos nuevamente al 2011, en aquella ocasión hay que recordar que S & P Ratings recortó por primera vez la calificación crediticia de Estados Unidos debajo del máximo nivel de AAA. Y bueno, esto fue un tema también sin precedentes, fue un hito para la percepción del crédito de riesgo. Y bueno, ha sentado un precedente porque desde 2011 hemos notado que cada vez hay un especial énfasis sobre lo que sucede con las cuentas fiscales en Estados Unidos, sobre todo cuando se llega ya muy próximo al límite del endeudamiento.
Y bueno, otra situación similar también se vivió en el 2013, con una importante pugna entre legisladores tanto republicanos como demócratas, que generó una volatilidad muy notoria, prácticamente todos los activos financieros empezaron a observar importantes movimientos, pero que eventualmente finalizó en un acuerdo que ayudó a seguir con las operaciones. Y también, eventualmente, pues los mercados fueron normalizándose.
Bueno, en estos momentos está experimentando una situación altamente compleja, estamos hablando ahorita, 2021, estamos viviendo también una suerte de crisis política en donde no hay un acuerdo, no hay un alcance de los legisladores para tratar de empujar este límite de deuda. Por un lado se han llevado a cabo medidas extraordinarias para hacerle frente a los estragos que ha ocasionado la pandemia, lo cual, pues obviamente, ha llevado al nivel de deuda sobre PIB a 133 por ciento, 133 por ciento es un nivel altísimo, es casi lo que se observa en Japón y es un nivel sumamente alarmante que no es sostenible a lo largo del tiempo.
Y creo que vale la pena señalar que este nivel aumentó de manera significativa durante la crisis del coronavirus, ya que antes estaba en 107.7 por ciento. Entonces esto nos habla de que el nivel de endeudamiento de Estados Unidos es altísimo y que, de no llegar a un acuerdo, esto podrá tener ramificaciones muy importantes al resto del sistema financiero global.
Actualmente estamos viendo que la deuda está en niveles muy altos, una deuda que suma cerca de 28.5 billones de dólares, que además podrá triplicarse hacia el final de la década según información, por ejemplo, de la Oficina de Presupuesto del Congreso, así como otros organismos independientes que analizan de manera muy puntual el comportamiento de las cuentas fiscales en Estados Unidos.
El límite de deuda podría ser extendido o suspendido antes de una fecha caótica, pero de tardarse más, esto podrá ocasionar problemas sobre la percepción de riesgo, y no solamente riesgo soberano, sino también en los efectos secundarios que puedan tener sobre la percepción del riesgo crediticio de varias de las empresas y eso es algo que han advertido muchas agencias calificadoras como ha sido el caso de Fitch que, por cierto, hay que recordar que puso en perspectiva negativa la calificación de Estados Unidos desde julio del año pasado.
Bueno, pues para dar un poco de contexto y seguimiento a esta situación del límite de endeudamiento, el jueves pasado el Congreso votó por una medida llamada continuing resolution, la cual le permite al gobierno ganar un poco de tiempo; sin embargo, la actual secretaria del Tesoro, Janet Yellen, ha advertido que para el 18 de octubre será la fecha crucial donde se acaban los mecanismos a su disposición para evitar un cierre del gobierno.
Entonces como pueden ver, ahorita el tema central en los mercados financieros y el tema que están analizando cada uno de los inversionistas en Estados Unidos y el resto del mundo, es justo qué va a pasar con este límite de endeudamiento que ya se está acercando y que, de no tener una solución entre los legisladores, podría ocasionar una disrupción muy importante en los mercados financieros.
Y esto pues nos conduce al tercer tema que queremos tocar en esta ocasión, que también tiene que ver con la parte fiscal, pero ya no es el límite de endeudamiento, ahora es toda esta serie de negociaciones en torno al presupuesto que va a tener lugar en el siguiente año fiscal, así como un plan de infraestructura adicional que quiere llevar a cabo el presidente Biden por 550 mil millones de dólares adicionales.
Bueno, y todos estos comentarios nos conducen a un tercer tema que también se ha vuelto muy relevante en aspectos fiscales en Estados Unidos. Al margen de las negociaciones sobre el techo del endeudamiento, también estamos viendo una fuerte discusión entre legisladores en torno al presupuesto para el próximo año fiscal por un monto de 3.5 billones de dólares, así como un plan de infraestructura adicional por parte del presidente Biden por un monto de 550 mil millones.
Desafortunadamente, todos estos temas están fuertemente ligados, porque el estira y afloja es muy fuerte y obviamente cuando algunos legisladores empiezan a ceder en algunos puntos, comienzan a ser un poco más restrictivos en otros. Y por eso es que para entender el presupuesto también debemos de tomar en cuenta que está totalmente ligado a este tema del techo de endeudamiento.
Esta fuerte discusión en torno al presupuesto para el siguiente año fiscal, estamos hablando que contempla una serie de beneficios a familias y planes también de infraestructura, pero con enfoque social, obviamente además del presupuesto, el presidente Biden tiene un gran interés por llevar a cabo un plan de infraestructura adicional a lo que ya comenté en el primer tema.
La propuesta ha tenido el apoyo de Nancy Pelosi, que es la líder de la Cámara Baja y quien también lidera a los demócratas. Y bueno, el apoyo es por un monto de 550 mil millones; sin embargo, más allá de las dificultades para alcanzar un acuerdo entre republicanos y demócratas, también existe una fracción dentro de los mismos demócratas que es el ala progresista que se opone al programa original, que es el programa que apoya un poco más el ala moderada.
Los progresistas se oponen a respaldar el paquete para construir puentes y caminos, para presionar a los moderados para que apoyen el plan más ambicioso de gasto social y medioambiental de 3.5 billones de dólares.
Entonces como pueden darse cuenta, esta situación fiscal en Estados Unidos es altamente compleja porque estamos hablando de tres cuestiones que se están negociando al mismo tiempo, que requieren de un fuerte apoyo por parte de cada uno de los partidos y que, además, obviamente tiene implicaciones muy importantes que van mucho más allá de lo económico, también van hacia lo político porque hay que recordar que estamos también cercanos ya a las elecciones intermedias en Estados Unidos y esto puede tener un impacto importante sobre el votante.
Entonces, por eso es que probablemente todavía vamos a tener una gran incertidumbre en torno a todos estos temas, como mencioné anteriormente el 18 de octubre pareciera ser un día clave en donde, si no se alcanza un acuerdo, probablemente Estados Unidos sí tenga que llegar a un momento en el cual tenga que cerrar parcialmente, tenga que dejar de pagar algunas cosas y eso puede traer consigo un sentimiento de aversión al riesgo mucho mayor al que hemos observado con otros temas en las últimas semanas como ha sido el caso de Grupo Evergrande que, por cierto, analizamos en el episodio anterior de este podcast, así como la situación del coronavirus, la recuperación, las presiones inflacionarias.
Y bueno, ahora que estoy por cierto hablando de presiones inflacionarias, me gustaría tocar el cuarto y último tema, el dilema que está enfrentando actualmente el Banco de la Reserva Federal de cara al posible anuncio de la disminución de su programa de compra de activos conocido como el tapering.
Bueno, pues aquí también dando continuidad al segundo episodio de esta tercera temporada, en donde analizamos las oportunidades y desafíos del Fed y de Banxico, en esta ocasión me gustaría puntualizar sobre una gran posibilidad de que el Banco de la Reserva Federal en Estados Unidos anuncie este famoso tapering en su próxima reunión de política monetaria, los días 2 y 3 de noviembre, y permítanme solamente retomar algunos puntos de la última decisión del 22 de septiembre que ayudan a esclarecer cuál va a ser el plan de acción o el margen de maniobra que tiene el Fed hacia adelante.
Bueno, el 22 de septiembre el Fed optó por dejar sin cambio su postura monetaria; sin embargo, señalizó de manera muy clara que el anuncio sobre el tapering se dará pronto, de hecho el Banco Central explicó que si el progreso hacia sus metas de máximo empleo y estabilidad de precios continúan, la moderación en el ritmo de compra de activos podría iniciarse pronto, adicionalmente hicieron actualización a su marco macroeconómico; es decir, toda esta serie de pronósticos de variables económicas y financieras, en donde se mostró una fuerte baja en la estimación de crecimiento, pero también acompañada con un fuerte incremento en la inflación para este año.
Este fuerte debate que existe sobre las presiones inflacionarias, sobre qué tan transitorias son, o no, la naturaleza de los choques y demás, claramente ha puesto a muchos bancos centrales en una situación muy compleja y el Fed no es la excepción. Y bueno, tomando en cuenta esto, además de los comentarios que hizo Powell, donde dio más detalles sobre el tapering en la conferencia de prensa, explicando que podría ser adecuado, inclusive terminarlo a mediados del 2022, pues nosotros pensamos que la evidencia es muy clara, estas señales del Fed, la información económica que tenemos más reciente y los comentarios de varios miembros del Fed, después de darse a conocer el último anuncio, pues nos deja muy cómodos en Banorte con nuestra expectativa de que el anuncio del tapering se llevará a cabo en la reunión del FOMC del 2 y 3 de noviembre para iniciar con el proceso en diciembre.
Además, también seguimos esperando el primer incremento en la tasa de referencia hasta 2023, pero no descartamos que se pueda adelantar a finales del 2022. Entonces, no solamente es un tema complejo la parte fiscal en Estados Unidos, si no que a esto también se le agrega una situación sumamente interesante, respecto a la política monetaria, en donde probablemente el Fed ya esté próximo a normalizar las condiciones monetarias.
Como pueden ver, Estados Unidos va a ser uno de los principales focos de atención a lo largo de este cuarto trimestre, porque lo que suceda en ambos frentes, en la parte política fiscal y en la parte política monetaria, les aseguro que tendrá un impacto muy importante en todos los mercados financieros y probablemente en las decisiones que todos nosotros tomemos, ya sea en la parte de tasas de interés, de divisas, de precios de commodities, en fin. Yo creo que es un tema muy importante que hay que seguir de forma puntual y por eso es que me pareció interesante platicarlo justo en este podcast.
La recomendación.
Vinos, libros, películas y más de los actores económicos.
Amigos de Norte Económico, hemos llegado a la última sección de este podcast, una sección muy gustada por todos ustedes, de hecho, agradezco todos los comentarios que nos hacen en redes sociales y distintos canales de comunicación en donde interactuamos juntos. Y bueno, en esta ocasión, en términos del vino, me gustaría recomendarles Rafael de Adobe Guadalupe, es una casa que se encuentra en el Valle de Guadalupe, es un vino que tiene una mezcla de Cabernet Sauvignon & Nebbiolo, con aromas de frutos rojos y vainilla, realmente espectacular. Y de hecho es un vino que tiene excelente posición dentro de los mejores vinos del mundo.
Y si me permiten ahora, también hacer una recomendación en la parte de libros, dada esta complejidad que estamos viviendo desde 2020 con la crisis del coronavirus y las respuestas que hemos visto de políticas públicas en todo el mundo, hay un libro que me parece muy interesante que se llama ‘Fault Lines’, un poco habla, como pueden ver el título hace alusión a estas fallas en las líneas, las líneas sobre todo que vemos en las placas tectónicas, que ocasionan los terremotos.
Bueno, este libro lo escribió Raghuram Rajan, que es un profesor de economía que es muy conocido en el medio financiero y obviamente en la academia y ahí hace un análisis muy interesante y muy puntual haciendo un poco alegoría a lo que sucede con los terremotos, sobre muchos de los riesgos que se tomaron de manera desmedida, en la crisis de 2008 y 2009, cómo influyeron varios factores para que una crisis financiera se desatara en una gran crisis económica global, y creo que es un libro que nos permite también reflexionar sobre lo que está pasando actualmente, que estamos saliendo de otra crisis importante, una crisis sanitaria como es la del coronavirus que inició en el 2020 y que más allá de la parte de salud, pues ha tenido repercusiones muy importantes en la parte económica y financiera.
En este 2021, como lo hemos platicado ya en otros episodios, estamos experimentando una fase de recuperación, una fase de transición hacia una nueva normalidad pospandémica, pero me parece que muchos de los temas que toca Rajan en su libro ‘Fault Lines’, pueden ser muy interesantes para entender el contexto actual.
Y bueno, espero que estas dos recomendaciones sean de su agrado, muchas gracias.
Bueno, en esta ocasión tocamos temas muy importantes en la parte fiscal y monetaria en Estados Unidos, yo creo que una de las grandes reflexiones o conclusiones que podemos sacar de este episodio y de lo que estamos viviendo actualmente, en la parte fiscal, es que probablemente todavía vienen varios días de volatilidad, incertidumbre, impasse político entre los principales actores, tanto demócratas como republicanos, nosotros pensamos en Banorte que no vamos a llegar a un punto en el cual Estados Unidos tenga que verse forzado a cerrar operaciones y dejar de pagar parte de sus pasivos, pensamos que estamos en una situación similar a la de 2011, 2013, en donde al último minuto los legisladores van a tratar de llegar a un acuerdo, van a tratar de suspender el límite de deuda por un año o dos años, obviamente el ceder para este tipo de cuestiones, pues tendrán implicaciones para otro tipo de negociaciones que hagan para más adelante, en temas presupuestarios, en temas de otros paquetes, pero lo que pensamos nosotros es que de aquí a probablemente algo cercano al 18 de octubre vamos a seguir teniendo una alta incertidumbre, mucha volatilidad en los mercados financieros, pero no llegaremos a ese punto crítico en donde Estados Unidos tendrá que cerrar parcialmente y dejará de pagar parte de sus pasivos.
Otra gran reflexión es que estamos viviendo un momento crucial en términos de los estímulos tanto fiscales como monetarios. Del tema fiscal, como lo comenté a lo largo del podcast, la respuesta del gobierno en Estados Unidos ha sido sin precedentes, esto ha ayudado a una recuperación económica mucho más vigorosa, mucho más rápida y sostenida de lo que probablemente teníamos contemplado originalmente, pero también trae consigo retos muy importantes de mediano y largo plazo, ¿qué va a pasar con este fuerte endeudamiento? ¿Estados Unidos tendrá que llevar a cabo una reforma fiscal en el corto plazo? ¿Qué implicaciones puede tener esto también para las elecciones intermedias y para los planes futuros del Presidente Biden?
Creo que son preguntas muy interesantes que nos llevan a una reflexión, que finalmente este estímulo fiscal no puede durar para siempre y que en algún momento esto tendrá que moderarse y ahí es cuando los mercados tendrán que llevar a cabo un ajuste en expectativas, a lo mejor ahorita no es el momento, pero esto nos lleva a un fuerte debate que vamos a estar teniendo probablemente en los próximos años sobre la sostenibilidad de las cuentas fiscales en Estados Unidos.
Otra gran reflexión de los puntos que tocamos aquí, es que probablemente el Banco de la Reserva Federal, en Estados Unidos, estará anunciando el tapering en su próxima reunión de noviembre, esto creo que los mercados ya lo descuentan con una gran certeza, con una elevada probabilidad. Esto significa que irán normalizando poco a poco este gran estímulo cuantitativo que llevaron a cabo sobre todo en la parte más álgida de la crisis de la pandemia.
Consideramos que el Fed va a ser prudente y va a ser gradual y va a utilizar su canal de comunicación para no generar disrupciones innecesarias en los mercados financieros, simplemente porque quiere evitar la volatilidad, quiere evitar todos esos efectos negativos en los mercados financieros y en la economía que se dieron durante el Taper Tantrum de 2013.
El Fed probablemente aprendió la lección y ahora va a ser mucho más claro, mucho más transparente, mucho más gradual al momento de normalizar y va a tratar de ser muy claro en separar el manejo de su hoja de balance de su programa de compra de activos por un lado y el manejo de su tasa de interés por otro lado. Con el tapering creo que pueden ser un poco más complacientes, pensando en que las metas ya se han estado cumpliendo, sobre todo en la parte de inflación, no tan claro en la parte económica, y yo creo que para la tasa de interés van a ser un poco más rigurosos, esperan a ver señales mucho más claras de una recuperación fuerte, sostenida, incluyente hacia toda la economía y hacia todos los actores de la economía en Estados Unidos y por eso creemos que primero van a llevar a cabo el tapering, van a tratar de terminarlo y después van a empezar a llevar a cabo una normalización de su tasa de interés.
Este escenario es el que creemos nosotros que es el escenario central, esto es lo que probablemente explica la forma de la curva de rendimientos en Estados Unidos y también, probablemente, esto explica el comportamiento de otros activos financieros, como es el caso de las acciones, como es el caso del comportamiento del dólar americano frente a las divisas del G-10, frente a las divisas de países emergentes.
Así que como mencionaba, este cuarto trimestre va a ser muy importante enfatizar, observar, tratar de analizar de alguna manera clara y puntual qué es lo que va a suceder con las políticas económicas en Estados Unidos, porque eso pueden determinar muchas cosas que suceden hacia adelante en mercados financieros más allá de este último trimestre del año, a lo mejor también para este 2022.
Así que, con estas conclusiones, les agradezco mucho su atención, y bueno, nos escuchamos la próxima semana con una entrega más de Norte Económico. Muchas gracias a todos, les mando un fuerte abrazo.